Desde hace más de 10 años, Mundo de Niños ha logrado reintegrar a niños de la calle en la sociedad en el Perú. Ahora el proyecto está en peligro. Usted puede ayudar con una donación.
Elizabeth Kelly-Semrau, la esposa del fundador de Porta Mondial, Joachim Semrau, muestra una foto de un grupo de estudiantes riendo alegremente para la cámara. Es difícil creer que hace sólo cinco años, uno de ellos – Elmer Machuca Chacón– seguía limpiando parabrisas de los coches en la calle para aumentar los ingresos de su familia.
Gracias a Mundo de Niños, el que fuera niño callejero Elmer (3. por la derecha) hoy estudia ciencias de la comunicación en la universidad de Trujillo.
Nuestra historia tiene lugar en Trujillo, en el norte del Perú. Con más de 760.000 habitantes, es la segunda mayor aglomeración urbana del país después de Lima. Abandonada por su marido y padre de sus dos hijos, y con pocos estudios o formmación profesional, la madre de Elmer y su hermana Magaly luchaba por ganarse la vida como lavandera, ofreciendo sus servicios de casa en casa. La familia vivía en las afueras de la ciudad, en una choza con techo de cañas y lonas, sin electricidad ni agua. No había camas o muebles adecuados aquel pequeño espacio. La familia dormía en una pila de colchones viejos que habían rescatados de la basura.
Para ayudar economicamente a su madre, Elmer trabajaba limpiando parabrisas de coches en la calle.
En vez de ir a la escuela Elmer pasó la mayor parte de su tiempo en las calles, tratando de ganar algo más de dinero para la familia. Su destino parecía sellado: sin educación, sin trabajo, sin futuro. Nadie sabe con exactitud cuántos niños callejeros hay en Perú ya que no se registran centralmente, pero algunos dicen que pueden llegar a ser 500,000.
Las estadísticas y las cifras, sin embargo, no son tan importantes, porque aunque hayan 5.000, 50.000 o 500.000, siguen siendo demasiados.
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Niños de siete años durmiendo al borde de la calle
Al igual que Elmer, algunos niños callejeros ayudan a sus familias; la mayoria, sin embargo, prefieren abandonar el hogar voluntariamente y vivir solos en las calles, en lugar de enfrentarse al maltrato continuado que va desde la violencia doméstica hasta el abuso sexual.
La vida de los niños callejeros es una lucha diaria por la supervivencia. Estos niños no conocen las reglas sociales: el único vínculo social que tienen es con sus socios en la miseria, y mantienen la cabeza fuera del agua con trabajos ocasionales o robos. Los más jovenes de ellos tienen a menudo tan sólo siete años de edad. Viven con el temor constante de la policía, los criminales y los niños mayores que les aprisionan, roban, maltratan o violan. Para olvidar, inhalan la droga por ellos elegidos, el “Terokal”, un pegamento utilizado por los zapateros.
La trabajadora social Diana Trujillo Cleto está familiarizada con el destino de estos niños. Bajo el auspicio de la organización de ayuda de Mundo de Niños, ella va regularmente a los lugares donde se congregan los niños callejeros. Con la ayuda de una gran dosis de paciencia y sensibilidad, poco a poco se gana la confianza de los niños. Los niños la conocen, pero son tímidos y han aprendido desde el principio que no se puede confiar en nadie.
Negándose a rendirse, sin embargo, Diana organiza partidos de fútbol y otras actividades. Poco a poco los niños se abren, – juegan, se divierten y durante un rato finalmente tienen la oportunidad de “simplemente ser niños”.
La trabajadora social Diana Trujillo Cleto, juega con los niños.
Un hogar para niños callejeros
Diana también les cuenta a los niños acerca de Mundo de Niños, un lugar donde pueden recuperar su futuro. Esta organización sin fines de lucro – fundada en 2001 por Andreas Clamer, un alemán que vive en España – dirige un hogar en Trujillo para niños callejeros de entre 7 y 15 años. En 2009, Mundo de Niños abrió un segundo hogar para chicos de 16 a 20 años de edad en Huanchaco, una conocida playa a 13 km de Trujillo. En ambos sitios, los niños están dia y noche bajo el cuidado de personal cualificado.
La reinserción social de estos niños a menudo traumatizados y adictos a las drogas, es un proceso laborioso y es supervisado profesionalmente por profesores, psicólogos y trabajadores trabajadores sociales.
Los niños son introducidos gradualmente a las normas básicas de convivencia socialmente aceptable, aprenden a respetar la propiedad de otros, abandonan el lenguaje callejero, y descubren que los conflictos también se pueden resolver sin violencia. Su regreso a la escuela es un elemento importante del programa educativo. Los niños son introducidos al trabajo creativo en los talleres propios de la organización, y aprenden cómo utilizar las herramientas de preparación para la formación profesional posterior.
Elmer (a la izquierda) como un orgulloso estudiante de Mundo de Niños 2007.
Elmer tambien oyó hablar de Mundo de Niños de esta forma. En 2007 finalmente llegó a su puerta, y así aprovechó la oportunidad de una vida mejor. Vivir en la casa, le ayudó no sólo a completar su educación regular, pero luego pasó a graduarse en bachillerato técnico. Ahora está estudiando ciencias de la comunicación en la Universidad de Trujillo. También sigue apoyando a su madre ya su hermana – que ya no viven en una choza sino en una casa de construcción sólida – aunque para evitar faltar a la escuela, sólo toma trabajos vacacionales.
Hogar para niños callejeros amenazados por el cierre
Actualmente Mundo de Niños está al cuidado de 22 niños de edades comprendidas entre 7 a 19 años. El proyecto esta financiado por donaciones privadas de particulares y empresas como Porta Mondial AG. Hasta la fecha, su socio principal es la Fundación MERIDIONAL de España, pero los efectos de la crisis económica española se hacen sentir por primera vez este año. Por motivos económicos, Meridional no podrá cubrir todos los gastos de operación de Mundo de Niños en 2013, que es la razón por la cual Andreas Clamer y su equipo necesitan urgentemente más socios y donaciones, para que la organización pueda continuar su valiosa labor.
Los Semrau han estado apoyando a la organización desde hace años y, como socio español, Porta Mallorquina también ha hecho donaciones periódicas al proyecto. A partir de 2013, Porta Mondial AG hará una asignación para la organización de ayuda en su RSC (responsabilidad social corporativa) del presupuesto. Al explicar esta decisión Joachim Semrau dijo:
“Como agentes de bienes raíces, cada día experimentamos el placer de encontrar nuevos hogares para familias. Por tanto, es lógico que hagamos un compromiso de caridad para un proyecto que da a niños callejeros una casa”.
El lema de Mundo de Niños ‘es: Toda persona tiene derecho a un futuro. Usted puede hacer esto posible con una donación.
Nombre de la cuenta: Mundo de Niños e.V.,
Número de cuenta: 7495507403, Código: 600 501 01
IBAN: DE29 6005 0101 7495 5074 03
BIC / SWIFT: SOLA DE ST
Baden Württembergische Bank Karlsruhe (BW-BANK)
Nota: Dado que todos los gastos administrativos y de viaje corren a cargo de los miembros de la organización en sí, el hogar de niños se beneficia directamente de todas las donaciones.
Más información sobre Mundo de Niños:
www.mundodeninos.org, Facebook o YouTube
Mundo de Niños devuevle a los niños peruanos su futuro.